En la tercera tarde de toros de la Feria de Otoño, actuaron los diestros Sergio Aguilar, el mejor de la tarde, David Mora, que dejó bastante que desear e Iván Fandiño, al que se le concedio "la oreja de consolación". Con toros de la ganadería de Valdefresno.
El primer turno en torear fue para el diestro Sergio
Aguilar, el cual en el primer toro no supo aprovechar al principio todo lo que
pudo habérle sacado al toro, luego empezó a darle a toro una serie de pases
por naturales que hicieron que los espectadores empezaran a mostrar mas interés
a lo que por desgracia se anunciaba. El segundo morlaco que le tocó a Sergio
Aguilar, era un toro vivo y gracioso, con pinta de que podría “haber tema” en
el albero, pero el picador debido a alguna extraña razón de que le apretase
mucho el castoreño o otra cosa pico al toro demasiado, haciendo que a la hora
de la verdad, el toro perdiese toda su fuerza y dejando literalmente para el
arrastre las posibilidades que el diestro pudo tener.
En esta ocasión, Iván Fandiño no tuvo una tarde muy
propicia. En el segundo toro de la tarde, una faena buena, pero no para darle
la oreja, que no pidió la mayoría del publico, pero sin embargo la presidencia decidió
dársela. En el cuarto toro de la tarde los pases con la muleta de Fandiño, ya
eran más depurados, una unos buenos derechazos, pero a la hora de matar, no
terminó de repuntar bien, lo que lo hizo una vuelta al ruedo, que,
si fue bien merecida.
A la hora de la verdad para el matador David Mora, en su
primer toro, intentó darle los pasos con la muleta sin darse cuenta de que hay
formas de colocarse que no son las más idóneas para darle los pases al toro. En
su segundo toro, más de lo mismo, esta vez, acompañado por el peor toro de la
tarde.
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